Luciano Supervielle - Perfume

Luciano Supervielle - Perfume

Perseguiré
los rastros de este afán,
como busca el agua la sed,
la estela de tu perfume

Perfume...

Me atravesó
tu suave vendaval,
rumbo a tu recuerdo seguí...
la senda de tu perfume.
No hay soledad
que aguante el envión
el impulso antiguo y sutil,
del eco de tu perfume

Perfume...
del eco de tu perfume.

Me atravesó tu suave vendaval
rumbo a tu recuerdo seguí...

La estela de tu perfume
Perfume...
del eco de tu perfume.
Perfume...
del eco de tu perfume.

El cretino

Con una lengua afilada,
pero un nudo en la garganta,
digo verdades que no son.
Busco sombras en el sol.

Desconfiado de la felicidad,
escéptico del amor.
Camino solo por el mundo
jugando a ser un tipo rudo.

Y cuando la noche caiga serena
será la luna mi compañera.
Siempre puntual: confiable.
Estira su mano; acepto el baile.

Aunque sea distante,
sé que la quiero.
Su frío abrazo es mi refugio
Soy atalaya, ella es muro.

Pero asedia a ese castillo
la cruda realidad.
Cierro mis ojos, me defiendo:
"No es verdad... No es verdad."

Noche

Existe un pasado al que yo mismo persigo y atormento.
Lo critico, lo desprecio. Pero al mismo tiempo ir no lo dejo.

Pasan rápido los días sin luz, se hacen eternas las noches en vela.
En la oscuridad invisible el eco de tu silencio me condena.

Una vez más pronuncio tu nombre y quiebro mis promesas.
El viento se lleva mi recado pero ningún oído lo espera.

A mi lado siguen su lento baile las manecillas del reloj.
No se detienen ante nada, ni se compadecen de mi dolor

Finalmente me rindo, me levanto y pongo esa música fatal.
Sólo en el sepulcro de tu recuerdo logro encontrar la paz.